Después de recuperarme de la fiesta de fin de año, retome los entrenamientos el fin de semana. El sábado un suave entrenamiento para quemar un poco los excesos en Guamasa, Sauzal... Ritmo tranquilo y cadencia en compañía de Javi, Aaron y Espinel. El domingo fue un poco diferente por que me tocaban 4 horas y aproveche que los chicos iban al monte para salir desde las Raíces, subir el Teide y venir por La Orotava. Pues si un buen entrenamiento con una buena compañía, ese día le tocaba trabajar a Matias y subimos juntos, a ritmo tranquilo aunque sin darnos cuenta se iba animando el ritmo, es que Matias me quería dejar tirado... Jajaja. La verdad que para subir el Teide quien mejor que Matias que lo sube una vez a la semana como mínimo y se sabe todos sus secretos, desde aquí le mando un saludo y seguro que subiremos otro día.
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